La vida para los perros callejeros está llena de desgracias, no sólo deben sobrevivir a los peligros que la propia calle ofrece sino también adaptarse a todos los cambios que va experimentando su cuerpo al no recibir la atención necesaria.
Algunos perros, sobre todo los de pelaje más grueso, acaban completamente enmarañados y sucios, lo que resulta visiblemente inquietante para algunos transeúntes que, lejos de prestarles la ayuda que necesitan, cruzan la calle ignorando el dolor que puede sufrir el peludo. .
El pelaje del perro era tan largo que le bloqueaba la visión.
Afortunadamente somos más personas buenas y siempre hay gente dispuesta a ayudar a los más vulnerables. Esta es la historia de un perro que deambulaba solo por las calles de Tailandia.
Su pelaje estaba enredado y largo, su estado estaba completamente deteriorado, su pequeño cuerpo había quedado cubierto por una enorme bola de pelo enredado y sucio.
Tenía rastas largas y muy sucias que hacían que el perro oliera mal.
Al parecer había sido abandonada por sus dueños cuando se hizo adulta; debido a su condición, es posible que estuviera en la calle desde hacía algunos años.
Su destino cambió cuando se cruzó con un peluquero canino que decidió brindarle la ayuda que tanto necesitaba.
La primera vez que el peluquero canino, Kriengkrai Thatawakorn, vio al perro, estaba buscando algo para comer entre un montón de basura. Una escena desgarradora para cualquier amante de los animales.
Varios kilos de piel sucia fueron a la basura.
El hombre la tomó en brazos y la llevó a un lugar seguro. Desde entonces comenzó un proceso de transformación increíble para este perro mayor, pero con muchas ganas de disfrutar de una segunda oportunidad.
Lo primero que hizo el buen hombre fue bañarlo y luego cortarle todo el pelaje.
Kriengkrai ha dedicado los últimos años de su vida a viajar por el país y rescatar perros abandonados de las calles.
Este es un perro mayor. Es posible que sus anteriores dueños la abandonaran debido a su edad. “Había estado desatendida durante mucho tiempo”. Dijo Kriengkrai Thatawakorn.
Por suerte, el destino de esta perrita cambió gracias a un hombre que decidió transformar no sólo su apariencia sino también su vida. Kriengkrai logró encontrarle un nuevo hogar, un amigo que también es peluquero canino decidió adoptarla. Su transformación nos recuerda que un poco de amor y en las manos adecuadas todo es posible.
Este hombre no conoce límites a la hora de ayudar a los perros más vulnerables. Ha rescatado una gran cantidad de perros peludos durante mucho tiempo y espera seguir haciéndolo. Al respecto destacó:
“Es posible que perros como ella no sean bienvenidos en una peluquería de mascotas debido a la cantidad de trabajo que debe realizar un peluquero y, por lo tanto, tengo que ofrecerme como voluntario para ayudar a estas adorables criaturas”.
Este hombre hace un hermoso trabajo ayudando a tantos perros callejeros como sea posible. Sin duda, son esos pequeños gestos de amor los que marcan la diferencia.