Inicialmente se descubrieron trece ataúdes a principios de este mes, pero se han desenterrado otros 14.
Un total de 27 sarcófagos enterrados hace más de 2.500 años han sido desenterrados por arqueólogos en una antigua necrópolis egipcia.
Fueron encontrados dentro de un pozo recién descubierto en un sitio sagrado en Saqqara, al sur de la capital, El Cairo.
A principios de este mes se descubrieron trece ataúdes, pero le siguieron otros 14, dijeron las autoridades.
Los expertos consideran ahora que el descubrimiento es uno de los mayores de su tipo.
Las imágenes publicadas muestran ataúdes de madera bien conservados pintados de colores y otros artefactos más pequeños.
Saqqara ha sido un cementerio activo durante más de 3.000 años y está declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Uno de los ataúdes bien conservados del complejo funerario de la necrópolis de Saqqara.
“Los estudios iniciales indican que estos ataúdes están completamente cerrados y no han sido abiertos desde que fueron enterrados”, dijo el sábado el Ministerio de Antigüedades de Egipto en un comunicado.
‘Más secretos’
El comunicado añade que el Ministro de Antigüedades de Egipto, Khaled al-Anani, inicialmente retrasó el lanzamiento del hallazgo hasta que pudiera visitar el sitio él mismo, donde concentró al personal para trabajar en condiciones difíciles en el pozo de 11 metros de profundidad (36 pies).
Los trabajadores tuvieron que acceder al pozo profundo a través de un pozo.
Los trabajos de excavación continúan en el lugar mientras los expertos intentan establecer más detalles sobre el origen de los ataúdes.
Los expertos dijeron que los ataúdes no habían sido abiertos desde que fueron enterrados.
El ministerio dijo que esperaba revelar “más secretos” en una conferencia de prensa en los próximos días.
Algunos de los ataúdes estaban decorados con coloridos motivos ornamentales.
Otros artefactos descubiertos alrededor de los ataúdes de madera también parecen estar bien elaborados y decorados con colores.
Uno de los artefactos más pequeños encontrados junto a los ataúdes en Saqqara, Egipto.
En noviembre, se mostró al público por primera vez un gran alijo de animales momificados descubierto en 2018 por arqueólogos cerca de la pirámide escalonada de Saqqara.
El descubrimiento incluyó gatos, cocodrilos, cobras y pájaros momificados.
Saqqara, situada a unos 30 kilómetros (18 millas) al sur de El Cairo, es un antiguo cementerio que sirvió como necrópolis de Menfis, la capital del antiguo Egipto, durante más de dos milenios.
En los últimos años, Egipto ha intensificado la promoción de sus hallazgos arqueológicos en un intento por revivir su vital pero debilitada industria turística.